En primeros planos muy íntimos, la cámara capta una escena idílica que parece pertenecer a otra época: cerezas maduras, fotografías en blanco y negro y una casa de verano llena de recuerdos de la infancia aparentemente despreocupada de varias generaciones. Las viejas tías hablan del pasado y el tío Tudor también responde a las preguntas del cineasta. Poco a poco, le enfrenta a su trauma, del que él es responsable.
Olga es una cineasta moldava que vive en Bélgica. Estudió cinematografía durante seis años en la Academia de Música, Teatro y Bellas Artes de Moldavia, en 2018 empieza a estudiar dirección de documentales en el Programa Conjunto de Maestría DocNomads Erasmus Mundus, en 2020 se gradúa con "Nanu Tudor" y recibe el Oso de Oro en la Berlinale. Como cineasta, Olga está particularmente interesada en las historias, que pueden generar cambios sociales y crear una plataforma para la discusión.